Este fin de semana el programa VOLPA ha vuelto a hacer magia. Más de 30 años después sigue siendo un misterio como las personas que se suman siguen tejiendo sus vidas en un proceso que empezó con una llamada, una llamada a servir y a estar cerca de personas y contextos vulneradas y vulnerables y gente que se atreve a SER.
El fin de semana celebramos en Galapagar nuestro primer encuentro estatal VOLPA de este curso. Aunque hablamos de encuentro, en verdad
deberíamos decir encuentros, ya que al mismo tiempo que la nueva promocion de VOLPAs se reúnen para seguir su formación, sus formadores/as y un grupo de post VOLPA celebran encuentros paralelos para hacer sus propios procesos.
Así, en total unas 50 personas de los equipos de Andalucía, Alboan, Barcelona, Canarias, Extremadura, Madrid, Valencia, Valladolid y Zaragoza han hecho posible un encuentro donde se han ido tejiendo historias y procesos. Los VOLPAs en formación, un total de 22, cerraron con este encuentro la primera parte de su formación. Al mismo tiempo, 11 post VOLPAs que han estado uno o dos años en países como Kenia, Bolivia, Ecuador, Perú, Uganda, Brasil o República Dominicana insertados en proyectos y realidades donde están presentes las organizaciones socias de Entreculturas y Alboan pudieron escucharse y procesar sus vivencias para empezar a trabajar su itinerario personal de compromiso.
Por su parte, el grupo de formadores/as y acompañantes sin quienes este programa no sería posible estuvo formándose en “habilidades para la escucha” y trabajando y reflexionando para la mejora continua de este programa de voluntariado de larga duración que está siempre en continuo proceso de mejora.
La noche del sábado todo el grupo pudo escuchar el testimonio de Paloma García-Ogara que estuvo como VOLPA colaborando con Fe y Alegría Dominicana en el batey Lechería, donde la mayoría de la población que atiende esta escuela son hijos e hijas de migrantes haitianos. Un contexto lleno de desafíos y de fuerza y esperanza.
Tras casi dos días de encuentro cerramos en círculo nuestra vivencia del fin de semana. Se escucharon palabras de agradecimiento y alegría por lo vivido. Los procesos siguen y VOLPA sigue enriqueciéndose de personas maravillosas con muchas ganas de ser y hacer un mundo donde la justicia y el bien sean lo que más brille.