El Colegio Cristo Rey de Valladolid transformó su patio en un espacio de solidaridad durante la jornada del Bocata Solidario. Lo que podría ser un simple momento de almuerzo se convirtió en una poderosa acción colectiva para apoyar a las comunidades vulnerables en Líbano. Antonio y Miguel Ángel voluntarios de nuestra delegación, acompañaron esta actividad.
La comunidad educativa respondió con entusiasmo, adquiriendo bocadillos y camisetas cuyos beneficios se destinarán íntegramente al Servicio Jesuita a Refugiados (JRS). Esta recaudación se materializará en ayuda humanitaria esencial: alimentos, cobijo y apoyo psicológico para quienes sufren las consecuencias de la crisis en el país mediterráneo.
Más allá del impacto económico, esta iniciativa cultiva valores fundamentales entre los participantes. El Bocata Solidario demuestra que las acciones locales pueden tener un alcance global, y que la distancia no es obstáculo cuando existe voluntad de ayudar a quienes más lo necesitan.

