Los días 29 y 30 de marzo tuvieron lugar las primeras Jornadas de Ocio Educativo que se organizan en el marco del proyecto Tot per l’aire dirigidas a profesionales de la animación sociocultural y de la juventud. En esta ocasión participaron alrededor de 30 personas técnicas de entidades sociales (YMCA, FISAT, Fundació per Amor a l’Art y Entreculturas) y técnicas de los centros municipales de juventud de València. Para ello, contamos con la colaboración de la Regidoria de Joventut, donde además se llevaron a cabo.
Las jornadas de esta edición, dedicadas a la perspectiva intercultural, contaron con dos talleristas de lujo que dinamizaron los talleres vivenciales de los dos días.
El primer día corrió a cargo de Gorsy del proyecto Eduk’art con el taller «El arte al servicio de la educación». A través de diferentes juegos de grupo y ritmos, fuimos aprendiendo sobre otras formas de ver el mundo guiados por la filosofía ancestral de un pueblo de Guinea Ecuatorial que compartió con nosotros Gorsy con mucha generosidad.
El segundo día contamos con la presencia de tres chicas del colectivo Cangrejo Pro, compuesto por mujeres chinas residentes en Madrid. A través de sus dinámicas corporales y juegos, compartimos el dolor de experiencias donde habíamos sufrido racismo o habíamos sido testigos próximos.
Finalmente, acabamos con una dinámica de evaluación que contemplaba también los prejuicios estructurales en el ámbito educativo y de dinamización juvenil en relación especialmente a la diversidad étnico-racial de los y las jóvenes.
A través de los dos días, pudimos hacer un recorrido por dos enfoques necesarios y complementarios: el primer día se trabajó desde una perspectiva intercultural, la cual es posible cuando hay una mirada horizontal y condiciones de igualdad entre culturas. Darnos este espacio era trabajar en la prevención (de discriminación, de discursos de odio…). El segundo día adoptamos una perspectiva antirracista y nos preguntamos ¿qué pasa cuando no ha habido prevención? Entonces abordamos la realidad del racismo y las múltiples situaciones que se producen.
Dedicarnos este tiempo y espacio para juntarnos y compartir desde el cuerpo y las emociones ha sido muy gratificante y transformador para todas las participantes y esperamos volver a generarlo el año que viene con las siguientes jornadas.